¡Atención, aventureros y fanáticos de perder dinero en casinos!
En este volumen, Kazuma se convierte en guardaespaldas real (sí, aunque suene raro) para la princesa Iris, quien está metida en un problemita de matrimonio arreglado. Pero tranquilos, porque nuestro “héroe” piensa resolverlo usando su mejor habilidad: la suerte ridículamente rota que lo hace ganar hasta en la ruleta del chino de la esquina.