Manga dirigido a un público adulto, presentado en una cuidada edición en cartoné con sobrecubierta. El volumen cuenta con 224 páginas en blanco y negro, mantiene el sentido de lectura oriental y forma parte de una serie compuesta por tres tomos, publicada originalmente en Japón por Shueisha.
La historia nos traslada a Dunwich, una apartada y sombría zona rural del estado de Massachusetts, rodeada de colinas coronadas por antiguos círculos de piedra y envuelta en presagios inquietantes. En la madrugada de la Candelaria de 1913, Lavinia Whateley da a luz a un niño de origen incierto, un acontecimiento que coincide con comportamientos cada vez más perturbadores por parte de su abuelo. Estos sucesos alimentan la desconfianza y el rechazo de los habitantes del pueblo hacia la familia Whateley.
Años más tarde, tras la muerte del anciano y la misteriosa desaparición de Lavinia, Wilbur queda completamente solo. Ya adulto, se obsesiona con cumplir un oscuro legado heredado: traspasar los límites de lo prohibido, invocar fuerzas ancestrales y preparar el regreso de entidades que no deberían volver jamás. Una adaptación inquietante y atmosférica que captura la esencia del horror cósmico y sumerge al lector en una espiral de misterio y fatalidad.
